sábado, 2 de julio de 2016

2/07|2016

Quizá hoy todo carezca de sentido, o por lo menos un poco. Ayer había claridad, todo era una mierda y eso estaba bien remarcado, sin dudas que me incomoden la existencia. 
 Prefiero esos días que marcan bien las emociones, que están de un lado o del otro, blanco o negro, sin esas tibiezas absurdas que te remueven las tripas. 
Hoy no sé si es un día de mierda o un día increíblemente hermoso. Estoy esperando ese chasquido, ese click que empuja para un lado o para el otro, o tal vez esté buscando hacerlo yo misma con una acción, o con una palabra que defina. 
Qué infelices son los días tibios. 

viernes, 1 de julio de 2016

1/07|2016

Primero de Julio 

Portazo de bronca, de huída feroz.
Mañana barata de pan y café. 
El mozo drogado, que mira a los ojos y pide perdón por el café frío, porque -es el primero de la máquina y sale así-. 
El hombre de atrás con su libro de 700 páginas quejándose por la música alta. 
Celebro silenciosamente la queja del señor. 
Los libros que quiero leer y no puedo comprar, se transforman en historias que necesito descifrar, al instante. 
Niebla de más, nublando existencias. 
Afuera humedad, cemento y caducidad de felicidad. 
La gente no quiere más, la gente no existe más.